Con una fórmula simple pero adictiva, Psyonix encontró el éxito tras corregir los errores del juego previo
Hace más de 10 años, Psyonix lanzó al mercado una idea que parecía revolucionaria. Supersonic Acrobatic Rocket-Powered Battle-Cars, el predecesor de Rocket League, era un título que combinaba futbol con vehículos impulsados por cohetes. Un concepto más simple de lo que el nombre podría dar a imaginar.
Sin embargo, 2008 no fue el año ideal para impulsar esta idea. El estudio desarrollador independiente vio cómo su juego, mejor conocido simplemente como SARPBC o Battle-Cars (porque el título original era demasiado largo para que cualquiera lo recordara), quedaba rápidamente en el olvido.
A pesar de ello, Psyonix volvió a trabajar en el concepto original: futbol y coches no podía estar mal. Así que pulió y corrigió todos los errores de Battle-Cars para una secuela y, en julio de 2015, estrenó Rocket League en PlayStation 4 y PC.
Casi de inmediato, Rocket League se convirtió en la sensación del multijugador en línea. De la mano de las crecientes plataformas de transmisiones en vivo como Twitch y con un nombre más simple pero atractivo, justo como el juego en sí, consiguió que millones de jugadores en el mundo se volvieran adictos al concepto.
Psyonix apostó por un crecimiento orgánico para Rocket League
La industria de los videojuegos es actualmente una de las más poderosas económicamente. Genera millones de ingresos en el mundo y cada vez son más las empresas interesadas en este mercado. Mucho de ello se debe a la gran cantidad de jugadores en el mundo que encontraron en el internet una plataforma para expresarse y conectarse con otras personas que comparten sus mismas pasiones.
Fue justo eso lo que aprovechó Psyonix para el lanzamiento de Rocket League. Tras ver cómo Battle-Cars se hundió sin que nadie supiera de su existencia, decidieron que con su nuevo juego tendrían una diferente estrategia de márketing. Hicieron a un lado las costosas campañas publicitarias y apelaron a crecer de forma orgánica entre los jugadores.
En 2015, los servicios de streaming como Twitch y YouTube estaban adquiriendo una gran popularidad. Por ello los desarrolladores de Rocket League decidieron impulsar su título en estas plataformas y en Reddit, millones de usuarios comenzaron a publicar gifs con sus mejores jugadas dentro de las partidas.
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‘Reddit fue absolutamente importante para nosotros. El subreddit de PS4 tomó nuestro juego durante la beta y eso nos impulsó bastante. Los GIFs se adueñaron de Reddit. Creemos que ahí es básicamente donde todo comenzó. No sé imaginarme Rocket League sin la facilidad de juntarte con tus amigos y jugar. Esa es una gran parte de su encanto‘, expresó Corey Davies, director de diseño para Rocket League, en entrevista con Eurogamer.
Fue así como las mecánicas sencillas pero adictivas de Rocket League comenzaron a hacerse virales en internet. Todo mundo quería postear sus clips de jugadas y hasta aquellos que nunca se habían interesado en el futbol, comenzaron a gritar gol en cada partido de coches.
De echar la reta con amigos a competir en escenarios internacionales
Con el paso de los años, la propiedad de Psyonix se volvió todavía más popular. La compañía recibió una gran cantidad de ingresos económicos y los jugadores se volvían cada vez más competitivos, al punto de transmitir grandes partidas entre diferentes equipos a través de Twitch. Esto los inspiró para anunciar el nacimiento de la Rocket League Championship Series en marzo de 2016.
La primera temporada de la RLCS resultó en un rotundo éxito. Se entregaron 55 mil dólares como premio en la primera temporada, pero se obtuvo más de 1 millón gracias a los ingresos por el interés que la liga generó. Los equipos querían convertirse en los mejores del mundo y esto motivó exponencialmente las descargas del juego.
Rocket League acaparó la atención de otras desarrolladoras, incluyendo a Epic Games, que en 2019 anunció la compra de Psyonix y, por supuesto, de su IP. Esto ayudó a que el juego cumpliera con su transición por completo a un estado ‘free-to-play‘. En septiembre de 2020, cualquiera podría jugar de forma gratuita y, además, con la opción de jugar en diferentes plataformas, gracias a que se habilitó el ‘crossplay’.
Gracias a ello, la pandemia por el Covid-19 no afectó tanto la escena competitiva. Si bien se enfocó en campeonatos regionales, Rocket League sigue estando tan activo como lo fue en su impresionante estreno. Es por ello que en Gamers Unite queremos dar una oportunidad a los jugadores mexicanos de mostrar sus habilidades en este esport.
A través de la página oficial del certamen, puedes registrarte al Torneo Gamers Unite featuring Rocket League. Los mejores equipos del país competirán por un premio de 3 mil dólares para el primer lugar, en un juego que deslumbró al mundo desde su lanzamiento, con un concepto que nadie ha podido superar.
