Arabia Saudita se convirtió en el segundo socio mayoritario de Nintendo al adquirir el 5,01% de la compañía, según reporta Bloomberg.
El Fondo de Inversión Pública (FIP), organismo de aquel país que realizó la compra de activos, expresó que el singular movimiento se hacía con “fines de inversión”.
Según reporta el Ministerio de Finanzas de Japón, el número total de acciones que forman Nintendo es de 129,869,000. El gobierno Arabe se hizo con 6,509,100 acciones, un 5,01%, que aunque suena a poco, convierte a Arabia Saudita en el segundo mayor accionista de la compañía japonesa después de Master Trust Bank of Japan.
No es la primera vez que aquel país llega a los titulares gracias a una notable incursión financiera en compañías de videojuegos. En 2021, El FIP invirtió una cantidad superior a los 3 mil millones de dólares en acciones de Activision Blizzard, Electronic Arts y Take-Two Interactive.
Más recientemente, a principios de 2022, el organismo adquirió acciones de Capcom y Nexon, sumando un valor de más de mil millones de dólares.
Activision, Capcom, SNK y ahora… Nintendo
Apenas en abril pasado, la compañía creadora de King of Fighters, SNK fue comprada casi en su totalidad por Mohammed bin Salman Foundation, empresa del príncipe heredero de Arabia Saudita, quién es señalado como gobernador de facto.
El polémico heredero lleva bastante tiempo tratando de diversificar la economía de Arabia Saudita a través de la inversión en videojuegos y se ha propuesto romper la dependencia de su economía a los combustibles fósiles.
Mohammad bin Salmán bin Abdulaziz Al Saud, hijo del rey Salmán bin Abdulaziz, actualmente se desempeña como viceprimer ministro del país. Además, ocupa los cargos de presidente del Consejo de Asuntos Económicos, presidente del Consejo de Asuntos Políticos y Ministro de Defensa.
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