Despierta de la simulación con Fortnite y Matrix

Con el inminente regreso de The Matrix este 22 de diciembre, Fortnite y Epic Games no se van a quedar con los brazos cruzados y lanzarán contenido exclusivo de la película dentro del juego.

Esta colaboración ya estaba en el juego con algunos guiños, como el fondo de la tienda que emulaba las letras de código clásicas y típicas de Matrix, así como el regalo especial de la cabaña navideña con el mismo diseño, el cual contiene una skin de arma que se asemeja a una de las que aparecen en las películas.

Aunque esto pudo ser lo único que Fortnite y Matrix compartieran, el juego nos mostró las dos previsualizaciones del contenido extra que llegará en colaboración, que son dos gestos especiales de dos movimientos icónicos de esta película.

El primero es el Bullet Time de Neo, la escena que se grabó con 120 cámaras y que hasta la fecha es una de las postales más importantes del cine de ciencia ficción y del estilo de las hermanas Wachowski.

Por otro lado, tenemos también la Patada Magistral de Trinity, otro de los momentos claves dentro de la primera entrega de Matrix que también la consolidó como una película de acción arriesgada y con el interés de generar nuevas propuestas visuales para este tipo de cintas.

Ambos emotes ya están disponibles dentro de la tienda de Fortnite, donde solamente los encontrarás por tiempo limitado como parte del lanzamiento de la nueva película de Matrix.

Matrix: Resurrections, la reivindicación de la franquicia

La nueva película de esta franquicia es el intento de Lana Wachowski por reestructurar la franquicia que inició con su hermana en 1999.

A pesar del éxito y el prestigio que consiguió su obra inicial, con las secuelas esta se fue perdiendo y lentamente cayó tanto en popularidad como en la aprobación de la crítica.
En esta ocasión, con solo Lana al frente, y con Keanu Reeves de regreso, pretenden restablecer la franquicia y la historia para hacer nuevamente una crítica al corporativismo, la industria hollywoodense y el abuso de la nostalgia como un selling point —que resulta bastante irónico—.