Blizzard Entertainment completó la absorción de Vicarious Visions, el estudio responsable de juegos como Tony Hawk’s Pro Skater 1+2 o Crash Bandicoot N. Sane Trilogy, entre otros

El proceso de fusión fue dado a conocer en enero del 2021 y desde entonces la compañía y sus 200 empleados pasaron a trabajar en proyectos de la desarrolladora.

“Nos hemos fusionado oficialmente con Blizzard Entertainment. Nuestro equipo de desarrollo permanecerá en Albany, Nueva York, y se dedicará por completo a juegos de Blizzard“, dice su tweet de despedida.

El estudio invitó también a que su comunidad siga la cuenta oficial de su nuevo propietario en Twitter, por lo que ya no se comunicaría de manera independiente. Todavía se desconoce la denominación que tendría con esta fusión. Incluso se especuló con el nombre de “Blizzard Albany”, situación que no ha sucedido oficialmente.

Un estudio con más de 30 años de experiencia

Durante todo este tiempo, la desarrolladora trabajó en el remake de Diablo II después de que Team 1 fuese apartado por sus malos resultados con Warcraft III: Reforge.

Como parte de la absorción, Jen Oneal, exdirectora de Vicarious Visions, pasó a ser la vicepresidenta ejecutiva de desarrollo de Blizzard y mano derecha de J. Allen Brack, presidente de la compañía.

Vicarious Visions se fundó en 1991 como desarrolladora independiente, antes de ser adquirida por Activision en 2005. En esa época trabajó en muchas de las mayores franquicias de la editorial, como Skylanders, Guitar Hero, Destiny y Call of Duty.

Tony Hawk’s Pro Skater 1+2 fue su último juego como estudio principal, con críticas favorables y un millón de copias vendidas en sus primeras semanas. Sin embargo, Crash Bandicoot N. Sane Trilogy, de 2017, fue su mayor éxito en consolas de generación pasada al vender 10 millones de copias en los dos años posteriores a su lanzamiento.

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